lunes, 14 de noviembre de 2005

Los gorrinos del estómago

No hace falta más que pronuncie la primera palabra para saber cómo va a ser el día. Y el de hoy se presenta positivo. Animados y optimistas hemos arrancado el día. Sin embargo, había una prueba de fuego. Vuelve a ser lunes, y la rutina tiene más inconvenientes que facilidades. Se enfrenta a las dificultades diarias, rodeada de fumadores, y eso le vuelve a despertar los gorrinos que dormían en su estómago. Con la sensación de ahogo se enfrenta a una mañana complicada, aunque más será la tarde. "Que no te ahogas", le digo yo para quitar hierro. Tengo la convicción de que son nervios agarrados al estómago por todo eso a lo que se va a enfrentar. De momento, los parches siguen guardados en el armario de los medicamentos y sólo baja el nivel de la cesta de caramelos.